sábado, 22 de enero de 2011

Intercambio de estrellitas

Intercambio de estrellitas / Lápiz sanguina, lápiz cepia, lápices pastel, Pentel Color Brush FR Black 101 / Click sobre las imágenes para ampliar.
Viniendo de Palma de Mallorca para Barcelona en barco, aún con las costas de Mallorca a la vista, saqué mis hojas y algunos lápices e hice este dibujo. Yo (que soy del 55) había pasado la noche de año nuevo junto a dos formidables artistas, el Tatúm (Jorge Isaurralde, Maciel, 1954) y el Max (Francesc Capdevila, Barcelona, 1956). A Tatúm lo veo algo mas seguido y a Max, aún cuando hemos coincidido durante algún tiempo publicando en la misma revista y habernos cruzado en alguna Feria del Cómic, no lo conocía tan personalmente, pero los tres somos mas o menos de las misma edad, y a mi modesto entender, eso basta para conversar en un argot altamente comprensible para nosotros y, no digamos incomprensible, pero sí difícil de traducir para nuestros contemporáneos de otras décadas, y conste que digo conversar refiriéndome a esa charla donde se detectan silencios y verborragias, introspecciones y confidencias, seriedades y carcajadas, que dejan claramente evidenciado algo semejante a un título, una copa o una medalla obtenida en el mismo campeonato, en el mismo barrio, en la misma manzana, en la misma vereda o talvez deviéramos decir en la misma travesura generacional de la vida.
Cuando empezamos a tener uso de razón, vislumbramos que hay algo mas allá del aprovechamiento integral y hasta excesivo de la teta de nuestras respectivas madres, algo volcánico en nuestro interior, genético pero a la vez muy propio e intrínsecamente personal, que nos impulsa a entrar en erupción y a tratar de comunicarnos con los demás pibes recién crecidos y casi recién nacidos. Generaciones enteras hemos venido practicando la revolución del destete durante siglos, desprendiéndonos un buen día del pezón materno y con esa recién obtenida independencia colgando de una gotita de calostro por la comisura de los labios, gateamos hasta el cerrojo de la puerta de calle tratando de alcanzar con nuestra insurrección en pañales esas veredas del barrio comunicadas con las veredas del resto del mundo pero sobre todo, llenas de individuos de nuestra misma especie, nacidos mas o menos por la misma época que nosotros y con los cuales podemos hablar en el mismo dialecto, y no solo hablar, sino además encontrarnos en la misma mirada sin hablar, y mirándonos a los ojos intercambiar secretos como si fueran figuritas con brillantina o repetidas, vivencias como si fueran sueños o pesadillas y ánimos como si fueran estrellitas de colores cálidos o fríos, da igual, simpre que nos bendiga el simple y puro interés de ser cómplice del otro.

16 comentarios:

nilda dijo...

lo mas lindo de las figuritas con brillantinas era guardarlas en un libro de esos de tapa muy dura, de carton, que siempre habia en las casas, supongase una novela de Dumas. y uno las guardaba y hacia volar las hojas en abanico y las encontraba guardadas, con algo del brillito salido que se pegaba en los dedos.
Lo mas lindo de la amistad,o el conocimiento generacional es eso que vos decis,tomi.Saber de que se habla y que se silencia y distinguir a la legua quien es una mierda.

Pito dijo...

Ud emociona.

Silvi Rivoira dijo...

Tu dibujo me llevo a recordar un poema del poeta Hjalmar Flax que dice

Sentados
a una cómoda distancia
hablamos y nos observamos.
Disfrutamos
nuestra sesión semanal.
A veces se desborda la hora
y seguimos conversando.
A veces vamos a tomar café.
Mantenemos siempre
altura en el pensamiento
y elegancia en la sinceridad.
Nos perdonamos.
Nos protegemos los sentimientos.
No contemplamos el fin
de nuestra concertada relación
donde espero que estés y me escuches,
donde somos casi amigos.

Te mando un beso.

el Tomi dijo...

Poder distinguir a la legua a los que son una mierda debe ser equiparable a ser Supermán y sentarse en la pieza de al lado de los dormitorios a elegir minita mirando a través de las paredes.
Y digo yo, Sirenita... ¿no serán figuritas con brillantina guardadas en el libro del mar las sirenas?.

el Tomi dijo...

No trato, Pito... se lo juro... pero al final me parece que las emociones se cuelan cuanto mas tratamos de disimularlas.

el Tomi dijo...

Hjalmar vendría a ser algo así como la antítesis de su profesor de morfología, Silvi, una de cal y una de brea. En fin, no hay nada mas íntegro que un corazón quebrado.
Yo también le mando un beso.

Cons Oroza dijo...

Lindo colorinche!
Estuve chusmeando tus blogs en general... que lindo uso de la anatomia señor Tomi *_*

Alejandra dijo...

Tomy, un honor enorme que haya pasado x mi blog,y que haya estado viendo mi dibrujos, soy una bruja que dibruja , rosarigasina x eleccion e incondicional admiradora de su arte!un beso grande

el Tomi dijo...

Alguna vez me dijeron que yo usaba para pintar lo que tenía al alcance de la mano, y es cierto, para mi, saber usar los colores que se tienen a mano es tanto o mas importante que elegirlos de una caja de ochocientos lápices o prepararlos mezclando setenta y dos pigmentos. Un día me encargaron un dibujo para la nota de un diario y de camino a casa encontré un trozo de ladrillo que me llamó poderosamente la atención, había caído a la vereda desde una vieja pared, seguramente erosionado por miles de lluvias, montones de sudestadas y del paso de algún que otro siglo. Su color rosa cansado gritando en medio del solazo de aquella siesta me terminó emocionando, así que me lo llevé. Hice el dibujo con pincel y tinta china y como no tenía a mano mis pinturas lo terminé coloreando con un degradé de ladrillo fantástico, con decirle que una vez impreso fue uno de los dibujos mas expresivos que recuerde, suficiente. Usted es muy expresiva, Conz, seguramente no le van a faltar oportunidades de pintar con los colores que su atenta mirada descubra en el camino.

el Tomi dijo...

A mi no me engaña, Alejandra... mire... no sabré decirle si esos ojos son nacionales o importados, pero usted no es bruja, es dibujanta.

Alejandra dijo...

Y...¿ adonde vio mis ojos Tomi?
No se confie con que no soy 'bruja' como ud piensa.
porque ya le hice un hechizo..jaja
Nooo, es broma, soy una dibusanta, no le quepa duda de eso..
un beso y vuelvo xq ademas de sus dibujos me divierten mucho sus textos

el Tomi dijo...

No sabe la algarabía que ha suscitado en mi corazón, Alejandra, he cifrado todas mis esperanzas en la llegada de ese hechizo que no puede traerme mas que buenaventura viniendo de una dibusanta como usted, denserio se lo digo.

Pd: No le ví los ojos, se los adiviné.

El Fan Nº1 dijo...

Como le envidio, poder departir e intercambiar pareceres con tan insigne personaje(Max). Aun a sabiendas de ser usted otro gran artista, que domina el medio. Se me antoja curiosa la combinacion si hipoteticamente unen sus fuerzas en una historieta al alimon, cada uno con su arte y por sus derroteros propios. Sin dudarlo sería de diez; dos genios que admiro y dos planteamientos artisticos que me motivan y me sugieren conmovedoramente...y no es trola.

el Tomi dijo...

Ni la mas poderosa unión de fuerzas podría superar la fuerza de un deseo tan humilde y cariñoso como el suyo, Número Uno.

Marycel dijo...

Mi viejo define a un tipo de complicidad como un "yo sé que tu sabes que yo sé", o tal vez sea ésta La complicidad por exelencia.
Que lindo cuando eso pasa.

el Tomi dijo...

-Si yo soy yo porque tú eres tú y tú eres tú porque yo soy yo, entonces ni yo soy yo, ni tú eres tú, pero si yo soy yo porque yo soy yo, y tú eres tú porque tú eres tú, entonces sí, yo soy yo y tú eres tú- dijo Bucay.

No hay nada mejor que un viejo cómplice, Maricel.