jueves, 30 de septiembre de 2010

Fierro cumple cuatro años

En realidad cumple muchos mas que cuatro, pero ya sabe usted como son las estrellas mediáticas, tratan de aparentar menos edad de la que tienen rejuveneciéndose incansablemente, y como en épocas de crisis recurrir a la cirugía estética de última generación es privativo del poder adquisitivo de los mas acaudalados, la clase media empobrecida echa mano a la cirugía estética de los tiempos de ñaupa, es decir, quitarse años en el documento nacional de identidad y declarar en público, por ejemplo, apenas cuatro cuando en realidad se cumplen largamente doce.
Carlitos Gardel haciendo el cuatro (Boceto y arte final) / Boceto: grafito y Edding 1200, arte final: Lápiz sanguina, lápiz sepia, pasteles y lápices pastel sobre papel anaranjado / Click sobre las imágenes para ampliar.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Peluquero vaginal

He rescatado algunas viñetas de la historieta Tangozando para traer a colación, ya que la crisis laboral no deja de amenazar con dejarnos en el mas brutal de los desempleos, el tema de la creación de nuevas profesiones o renovación de las ya existentes. En dicha historieta, Floreal, un peluquero de damas, en su afán por encontrar a la asesina de Onofre, uno de sus grandes amigos, logra aumentar la clientela femenina sumando a la croquiñol y al corte carré, revolucionarios peinados vaginales que conmueven a la opinión pública (a la que en este caso específico tranquilamente podríamos llamar opinión púbica) y colman las instalaciones de excitadas señoritas que ya han oído hablar de las bondades del secador de pelo expulsando aire cálido sobre la entrepierna.
Nuevas profesiones para paliar la crisis entonces, anotemos, peluquero vaginal / Click sobre las imágenes para ampliar / Grafito en polvo restregado sobre cartulina blanca, lápiz Othelo 6B, goma de borrar Staedtler dura y témpera blanca.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Caperucita Zorra

Muñeca Hot Little Red Hood diseñada para The Cha Chá Original / Boceto para la preparación de dicha muñeca (lápiz sanguina, lápiz sombra tostada, pasteles y témpera sobre papel madera) / Algunas páginas de la historieta “Caperucita Zorra” (basada a su vez obviamente en el cuento Caperucita Roja), publicada por la revista Kiss Cómic de Barcelona (2002) y en otra revista de cómic erótico de Inglaterra de la cual no recuerdo su nombre (sorry) / Click sobre las imágenes para ampliar / Actualmente he retomado las viñetas de dicha historieta con el título provisorio de “La Pelusita Floja”, modificando el guión en el marco de un estudio referente a las nuevas relecturas psicológicas de los cuentos clásicos / cha-cha@retemail.es / Made in Barcelona / También está el muñeco del lobo feroz ya presentado en este blog a principios de 2009, les dejo el link por si quieren refrescar la memoria.
http://eldesmitificadorargentino.blogspot.com/2009/01/diseno-de-juguetes-para-adultos.html

sábado, 11 de septiembre de 2010

Silencio desmitificador

El periodismo ha adquirido una locuacidad verborrágica tan distante del silencio que, aún siendo el silencio la antítesis del periodismo, resulta casi una imprudencia.
Algunos pasajes de un capítulo de "El desmitificador argentino" publicado en los noventas por la revista Cóctel Molotov que, ya en aquella época, hacía referencia al tema / Click sobre las imágenes para ampliar / Rotulador Edding 1200, rotulador Edding 3000, Lápiz Othelo 6B, difumino y témpera blanca sobre papel blanco.

martes, 7 de septiembre de 2010

Jesucristomi

Desarrollo creativo para la portada de la revista Toca Madera de Barcelona aparecida en 2007 / Autofoto tomada con la webcam, la misma foto retocada con Photoshop, dibujo a lápiz basado en la foto retocada, dibujo color, dibujo sin fondo, arte final con fondo aplicado, diseño de la tapa con el logotipo y los titulares dispuestos / Click sobre las imágenes para ampliar.
Aún a sabiendas de que nos creó a su imagen y semejanza, no es prudente creer que uno es Dios, pero avances tecnológicos tales como la telefonía móvil y el Internet son capaces de generar sensaciones de ubicuidad, de sapiencia y de poder de tal magnitud, que cabe la posibilidad de que una enorme cantidad de usuarios (por no decir la mayoría absoluta) se la crean y se endiosen, poniendo en tela de juicio no solo la reciente teoría con que Stephen Hawking se despachó en su último libro “El magnífico diseño”, asegurando que Dios no existe, sino planteando la seria probabilidad de que, de existir, sean muchos, o mas bien, seamos todos. Dicho esto, cabe aclarar que una cosa es endiosarse y otra muy distinta es creer ser el hijo de Dios, digo, porque mucha gente abocada a cargar con la cruz en este siglo veintiuno no se ve. Finalmente, que sea prudente que uno no se crea Dios no necesariamente significa que en determinadas encrucijadas de la vida no sea recomendable que uno crea serlo.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Aprendé a cruzar la calle

Dos páginas del capítulo “El nombre de las calles” de la historieta “Polenta con pajaritos” aparecidas en la revista “Fierro” (ochentera) de Buenos Aires / Clik sobre las imágenes para ampliar.
Aprender a cruzar las calles es una de las lecciones mas importantes de la vida. A todo tipo de calles me refiero. Aprender a cruzar la calle como metáfora de salvar los problemas, de atravesar los peligros, de esquivar la adversidad, de no dejarse llevar por delante, de no dejarse atropellar, de prestar atención a cada paso que damos. Aprender a cruzar la calle como límite y a mirar para los dos lados como si fuera para detectar por donde viene el bien y por donde se va el mal. ¿Aprenderse las calles?, ¡que boludos!,
¿aprenderse las calles de memoria?,
si son todas iguales, nadie espera
y al que espera, dirección obligatoria.
Gentes y autos bajo el sol, nada importante,
carne y chapa circulando como sangre
y a los novios de la esquina
los llevaron por delante.

Mirá para los dos lados,
aprendé a cruzar mas vale,
que desde que salen del concesionario
los autos ya saben cruzar a la gente,
de esa que en lugar del hombrecito verde
va mirando las chapitas en la brea.
Vos fijate de subir a la vereda
sin llevarte los cordones por delante.